Capitulo 41 (paula)

Bueno aki un capi chachi pistachi y suuuuuuuper romantico!!! By Pau! Bueno espero k os guste y dejad coments!!! Danke wapas!

Pues ahí estábamos, en una discoteca, solos, todos bailando… bueno, nos dábamos turnos, porque había más chicos que chicas. Tom, sin embargo, no me soltaba por nada del mundo.
P: Qué tal te lo estás pasando??
T: Qué pregunta es esa?? Me lo estoy pasando genial! Y la razón está enfrente mío.
Sonreí, colocándome en mi posición favorita: apoyada en su pecho. Tom me rodeó con sus brazos y empezó a jugar con mi pelo.
T: Te quiero tanto…
P: Y yo a ti.
Tom, con una mano, me levantó la barbilla y me sonrió con esa sonrisa tuya indescriptible. Se inclinó hacia mí, y yo cerré los ojos, entregándome plenamente a él.
Cris: Ejem…
Esto no podía estar ocurriendo!! Es que no tenía ojos en la cara para ver que estábamos un poquito ocupados?? Intenté tranquilizarme, no quería que Tom en vez de ver a una chica en su regazo viera a una leona xD.
P: Pasa algo, Cris??
Cris: Bueno… ehm… habéis visto a Andreas? Es que está muy raro!!
T: Raro??
Cris: Sí.
P: Qué le pasa?
Cris: No sé… nos ha preguntado a todas sobre una tal Paola. La conoces?
P: Pues no…
Cris: Está obsesionado con ella… Bueno, basta de charla. Quiero bailar. Bailas, Tom??
Ay, no! Tom me miró pidiendo auxilio.
T: Es que…
P: Ve.
T: Cómo has dicho????
Le apreté la mano cariñosamente, y me forcé a sonreír.
P: Que bailes con ella. No muerde xD.
T: Segura?
P: Segurísima!!
T: Bueno, pero es que-
Cris: Vamos!
Cris cogió a Tom de la mano y se lo llevó lejos de donde yo estaba. Y cuando ya me estaba arrepintiendo de haberle animado, vi a Tom empujar a Cris a un sitio en mi campo de visión, guiñándome el ojo. Entonces Gustav y Georg vinieron a sentarse al lado mío.
Gus: Estás cansada?
P: No te imaginas cuánto…
Ge: Qué mal, porque Gusti te iba a sacar a bailar…
Gus: Georg!
P: Ah! Pero tampoco tanto, hombre!
Gus: No no, traquila, otro día.
P: Bueno…
Gus: ¿Dónde está…
Gustav entonces buscó con la mirada a Tom, y cuando lo encontró, su sonrisa desapareció.
Gus: Será hijo de la gran…
P: Tranquilo, hombre! Que fui yo la que se lo pidió.
Entonces Cris consiguió poner las manos de Tom en su cintura, acercándose a él lo más posible. Yo aparté la mirada, porque sentí que me ponía mala. Y dentro sabía que Tom no quería, pero uno de mis mayores defectos eran los celos. Intenté escuchar a Georg, que nos hablaba sobre la gira, pero no me concentraba.
P: Chicos, necesito un poco de aire fresco, ahora vuelvo, ok???
Ge: Bueno, no tardes mucho guapa.
A Gustav no se le pasó desapercibido lo que había pasado, así que se ofreció amablemente a acompañarme. Así que salimos y caminamos un rato.
Gus: Tom te quiere. Soy uno de sus mejores amigos, y sé esas cosas.
Le sonreí.
P: Gracias, Gustav. Te creo, pero no sé si es lo mejor para él. Se está limitando mucho, y…
T: Paula?
Nos giramos, y allí estaba Tom, con aire preocupado. Gustav me apretó el brazo, y volvió a la disco. Yo le sonreí, y esperé hasta que entró.
T: Quieres que nos vayamos a casa?
P: No, pero en todo caso me iría yo. Tú te quedarías en la fiesta.
T: No hay fiesta sin ti.
A todo esto se acercó y me rodeó la cintura. Empezamos a caminar hasta que llegamos a la orilla del mar.
P: Tom, no puedes hacer esto.
T: El qué?
P: Dejar de hacer las cosas que te gustan, apegarte a mí.
T: Sí te refieres a Cris, está muy buena, pero…
P: No es sólo Cris. Es que después de ella vendrán más… y yo sólo quiero que seas feliz.
T: Entonces déjame estar contigo. es lo único que me hará feliz, aunque te cueste creerlo.
Paró, y me atrajo hacia él, tan cerca que no podía ver nada más que su cara.
T: Te amo, me oyes? Te amo. Y no vuelvas ni siquiera a pensar en que no eres como yo quiero, porque no soportaría es perderte.
Nuestros labios se buscaron nerviosos, y cuando se encontraron, se besaron con pasión. Quería trasmitirle de alguna manera que le quería más que nada en esta vida. En mi corazón el tiempo se paró, así que no sé cuánto tiempo duró el beso, pero equivalía a más de mil palabras.
T: Cómo puedo dejarte sin ninguna duda de mi amor por ti.
Le miré a sus ojos, que con la luz de la luna rosada tenían un color jamás visto.
P: Prometiéndome que en cuanto veas que esto no tiene futuro me lo digas sin dudar.
T: Pero esto sí-
P: Sólo promételo.
T: Bueno, te lo prometo.
P: Confío en ti.
Me puse de puntillas para llegar a sus labios. Después de darle un beso corto, pero lleno de ternura, suspiré, sintiéndome la persona más feliz que podía haber.
P: Bueno, pues, este es el final feliz.
T: No. Este es simplemente el comienzo.
Le miré de nuevo, y vi en él una sonrisa pícara, la sangre en mis venas.
P: Estás dispuesto a enfrentarte a enormes discusiones y obstáculos??
T: Si es contigo, me enfrento al diablo en persona.
Nos reímos, y entonces nos revolcamos en la arena como niños pequeños, con las olas del Mar Menor rompiendo a nuestros pies, y la luna sonriéndonos con alegría.

CONTINUARÁ…